viernes, abril 20, 2007

miércoles, abril 18, 2007

....Los Otros, los aludidos...



El proceso es difícil y será largo, porque los cambios culturales necesitan de décadas, pero las mujeres llevamos ya demasiado tiempo cambiando solas nuestra sociedad.


Hace tiempo que las mujeres nos hemos revelado ante esta situación de olvido y hoy reclamamos un profundo cambio en las estructuras, que efectivamente hagan de la nuestra, una sociedad sostenible. Las trayectorias subjetivas y culturales de las mujeres se han abierto a mil y un significados y expectativas, pero por el contrario en la sociedad ideada por los hombres, los cambios van despacio.


Las estructuras sociales no cambiarán mientras que la otra mitad de la población, los varones, no se den por aludidos y asuman su responsabilidad, entendiendo que las relaciones nunca deben basarse en la posesión de la otra persona.

domingo, marzo 18, 2007

El primer día de una SOCIEDAD DISTINTA


“Hoy es el primer día de una sociedad distinta”. Con estas palabras Zapatero comenzó su discurso para la defensa de la Ley de Igualdad. Y algunas tuvimos la suerte de vivir este momento histórico en el Congreso de los Diputados (y de las Diputadas, más que nunca).

Nos han gustado las notas que han escrito Monstse Boix (que nos regaló una clase de tecnología), y el brillante post de Marisa Soleto , ex becaria, entre otras cosas, del Insti.



En un día como este, nos teníamos que inmortalizar estas sonrisas en las escaleras del Congreso, para contárselo a nuestras nietas, como nos ha pedido nuestra jefa. Y junto al busto de Clara Campoamor... porque lo que queremos es que "los hombres encuentren a las mujeres en todas partes y no solo donde van a buscarlas..."(C. Campoamor).




"No quiero que las mujeres tengan poder sobre los hombres, sino sobre ellas mismas"
Simone Beauvoir

miércoles, enero 24, 2007

... y vino desde Paraguay a despertar a las españolas de la siesta




Reivindico mi derecho a mirar

desde otros ojos

A aprender de otras mujeres,

Las nadie, las dueñas de nada

Las ninguna, las ninguneadas

Reivindico la diversidad como riqueza

Mi artesanía como arte

Mi folklore como cultura

Mi dialecto como idioma

Mi vida como historia

Reivindico mi derecho a caminar ilusionada

A andar segura aunque sea descalza

Reivindico mi valor aunque no compre nada

Mi derecho a ser de donde esté

A sentirme hermosa amando a otra mujer

Reivindico mi belleza de madre, de vieja, de niña

Mi cuerpo que no oye, no anda, no ve,

Pero siente y grita

Reivindico mi derecho a crear otras formas de trabajar,

De comunicar, de sentir, de habitar, de escuchar,

De mirar, de vivir, de amar

Reivindico mi derecho a reinventar lo masculino y lo femenino

Hasta que termine confundiéndose

Reivindico mi derecho a quererme

A ser yo

REIVINDÍCOME

(Una parte de este manifiesto reinterpreta el texto “los Nadie” de Galeano
para hacerlo hablar de nosotras)

Hablando de adornos...se acabaron las navidades!!!!!



HEMOS REGRESADO Y VENIMOS A QUEDARNOS. VERO, DESDE AQUELLAS TIERRAS NOS HA ALERTADO DE LA PROLONGACIÓN DE NUESTRO LETARGO. ES CIERTO QUE EL CAMBIO CLIMÁTICO ESTÁ AFECTANDO A LA INVERNACIÓN DE LOS OSOS PERO ESO NO ES ESCUSA PARA NO ASOMAR NUESTRAS CABECITAS POR ESTOS BARRIOS. BIENVENIDA CRIS( DE AQUELLAS TIERRAS TAMBIÉN) Y RECUERDA QUE TE ¡ESTÁBAMOS ESPERANDO!!!!!!!
y para que así conste..... firmo sin tapadera (ME QUITÉ EL PAÑUELO)
SANDRI

jueves, noviembre 30, 2006

CUANDO LLEGA EL INVIERNO........


NOS JUNTAMOS, NOS ESCUCHAMOS, NOS MIRAMOS, NOS REIMOS, NOS ACERCAMOS, NOS OLVIDAMOS DEL FRÍO....EN ESO ESTAMOS.

jueves, noviembre 02, 2006

Hannah Wilke. Exchange Values



Primera retrospectiva en España de esta pionera de la aproximación feminista al arte y de la denuncia de la ausencia de la mujer en el ámbito creativo
Octubre 2006

Wilke se inició en el arte como escultora, técnica que practicó con materiales tradicionales (cerámica) y otros enteramente novedosos (chicle, goma de borrar, látex); pero además abordó con intensidad la performance, la fotografía, el vídeo, la pintura y el dibujo. Criticada e incomprendida por sectores del feminismo más radical de la época, su cuerpo se erigió en el centro de su arte, su biografía personal fue su inspiración artística y su lucha política en el seno del feminismo constituyó el engranaje en el que se articuló su obra. “Exchange Values” (el título, prestado de Marx y utilizado por la artista en una de sus performances, tiene una doble interpretación: “valores de cambio” o el imperativo “cambia de valores”) es la primera exposición de Hannah Wilke en España y una de las escasas oportunidades de ver un conjunto amplio de su obra en Europa. La exposición es una producción de ARTIUM que se acompaña de una serie de conferencias y un ciclo de cine independiente que enmarcan el contexto artístico de Hannah Wilke.

Porque desde que nos conocimos han dejado de existir lo Lunes...

Porque cada mañana nos encontramos y nos miramos en los ojos de cada una, en sus sonrisas, en nuestras historias... que van haciendo mi-nuestra-tuya vida.

Para nosotras, que nos lo merecemos, nos regalamos esta canción, que nos gusta escucharla mientras compartimos el tiempo... y el trabajo también, claro.

Desde con os encontré los Lunes no son tan lunes...

domingo, octubre 29, 2006

....Te nos fuiste a Asunción....

Y nos dejaste con el otoño y tus ideas y tus risas de Agosto... Solas en el 27, y sin historias en la cafeteria.

De nuevo, no sabemos si será por tí, pero desde que cruzaste el charco el tiempo ha empeorado en Madrid

Y esta canción nos recuerda tanto a ti..



¿Sigues despierta?

**** Sexismo Neocolonial ****



La islamofobia se instala entre nosotros.

Su negación es una legitimación de su continuidad, y ello hace que no dispongamos de las herramientas para erradicarla.(...)

Y ahora la morofobia-islamofobia va adoptando diferentes formas, pero tiene una fundamental en España: la que se articula a partir de la construcción que se hace de las mujeres y de las chicas arabo-musulmanas. Y sucede que las niñas con pañuelo en los colegios son asociadas, por parte de algunos responsables, a la autoexclusión, al fracaso escolar y acusadas de ¡proselitismo! para conseguir que más niñas lleven pañuelo. O que algunas personas de la comunidad universitaria muestren y demuestren descontento ante estudiantes de licenciatura y de doctorado con velo. En este sentido, los discursos supuestamente progresistas, como buena parte del feminista, no escapan de estos argumentos, sino que le dan mayor legitimidad.

Las feministas, sobre todo las de cierta edad, instigadoras de la institucionalización del feminismo en España, no quieren ni oír hablar de la cuestión del velo, y niegan cualquier interpretación que no ponga el énfasis en la presión familiar a la hora de llevarlo. Para ellas, el velo es una forma de subordinación clara, que ignora los valores igualitarios y que excluye a las mujeres. Los que ponen en duda esta afirmación son tildados peyorativamente como relativistas culturales. Involución es la palabra que se maneja para reflejar los cambios que ha habido en los últimos años en la condición de las mujeres, uno de los cuales sería el velo.

Es cierto que los derechos de las mujeres en los países arabo-musulmanes se han recortado, y que a la dominación tradicional se ha unido la de un Estado que, para legitimarse, usa el Islam en contra de las mujeres. Pero bueno sería considerar, por ejemplo, que muchas mujeres arabo-musulmanas eligen llevar el velo como forma de militancia, o para optimizar los escasos recursos que poseen y así poder optar a cierto prestigio, o a un mejor matrimonio, o como medio de movilidad social, o porque creen en Dios. Todo esto parece ser irrelevante para una parte importante del feminismo. Así, paradójicamente, el feminismo, que nace como una ideología de liberación para la mitad de los oprimidos de la Tierra, puede transformarse y servir a los intereses de la islamofobia.

De este modo, la islamofobia en España tiene su mejor baza en un sexismo imperialista, en lo que antes se llamó feminismo colonial, y ahora feminismo burgués. Se ubica en la época colonial, siglo XIX y primeros del XX, cuando se usaba la condición de las mujeres para primitivizar, en este caso, a los árabes, y para confirmar la idea de base: que las mujeres son sumisas y débiles, y los hombres, autoritarios y agresivos. Nuestra islamofobia, entonces, se sustenta en buena parte sobre la situación de las mujeres de "los otros".

La islamofobia, además, argumentada y justificada a partir de una crítica a la situación de las mujeres musulmanas, sobre todo las del pañuelo, que parece que necesitan ser salvadas. Por las otras mujeres, por nosotras, por supuesto. Y por eso, nuestras estudiantes, a quienes les pesaba como un fardo el pañuelo con el que nos tuvimos que cubrir la cabeza en la mezquita del Centro Islámico, discutían con el responsable. Habían decidido unilateralmente, sin consultarlas, salvar a las otras mujeres de la carga de llevarlo. A las mujeres de los otros.

Ángeles Ramírez es profesora de Antropología de la Universidad Autónoma de Madrid.

Este texto es parte de un artículo publicado en El País el 8 de Octubre 2006